martes, 4 de mayo de 2010

Todos somos parte del Plan Maestro

Siento más que nunca que los medios para expresarme son fríos y que, por más que lo intente, lo que demuestro no es siempre lo que pienso o mis verdaderas intenciones. Aveces tengo ganas de abrazarte, secar tus lágrimas y decirte que sos fuerte y que, por más absurdo que parezca, vas a estar bien, mejor que nunca.
Un pierna rota necesita un yeso, una gripe un remedio, pero un corazón roto tiempo, esfuerzo, dedicación y puede hacer que te en-gripes o te rompas una pierna. Al fin y al cabo no sos menos por quebrarte, sos más. Es muy fácil ponerse en el lugar ficticio del fuerte. Pocos tienen el valor para dejar correr el llanto sin vergüenza, todos lloramos.
El silencio es traicionero y la inspiración nocturna un arma de doble filo. Estas cosas son demasiado sólidas. Suelo desvanecerme en mi misma. ¡Qué problema, otra vez sueño despierta!
Son estos los momentos donde una mano amiga, un abrazo valen más que todo el oro del mundo, son la vida eterna, es un "no quiero que te vayas". Quise dártelo, no pude, fui una tonta. tuve miedo, no puedo evitarlo. Sin embargo, son más las cosas que perdí por tener miedo que las que gané. quién no arriesga no gana... no gana.
La finitud es inevitable, llegamos solos y partimos solos. formamos un ciclo sin sentido. Pero nunca me dijeron que las cosas debía tener si o si un sentido, es maravilloso que algunas no lo tengan. Quiero gritar bajo la lluvia, saltar, correr, sentir el viento en mi cara, solamente para saberme viva. Respirar, no pido el fresco aire del campo, me conformo con mi querida ciudad: respirar.
Me sorprendo de cómo uno puede sentirse identificado con varias canciones a la vez. No hay nada nuevo en nuestros sentimientos, es la materia prima. Luego, las formas de manifestación pueden crearse e innovarse. ¿Pero en sustancia somos todos lo mismo? Hoy soy más Sally que nunca y encuentro mil frases que podría transcribir y más de uno coincidiría conmigo, Qué lindo! Qué lindo cuando te entienden, cuando ves/escuchas al arte y podes ser mil personas a la vez con el mismo sentimiento. cuando me comprenden dejo de estar sola.
Sin embargo, si tengo que precisar un estado de animo en este momento señalaría mis ganas interminables de salir de aquí, de ir a un lugar diferente quizás a un tiempo distinto. Me siento encerrada en una cajita, comprimida e inestable como a punto de estallar.

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