lunes, 28 de diciembre de 2009

Bicho de ciudad.

Una cucaracha. Soy una cucaracha: esquivo las pisadas aunque provoco repudio. Hoy me siento así de asquerosa, sin la ventaja de las voladoras: carezco de alas. Tampoco corro con la suerte de las orugas, jamás seré mariposa. Confinada a salir en la oscuridad, a ocultarme de la luz que deja ver lo que realmente soy: mis defectos, los errores, los pasos en falso.
Juro que no se que hacer si mucho resulta ser demasiado y lo poco no vale la pena. Ni en los sueños mas preciados vas a fijarte en una cucaracha.
Hurgando entre mis entrañas voy descubriendo algunas verdades que no me hacen sentir bien, se me acaban los argumentos y temas de conversación. No quiero ser molesta ni pesada; me rehuso a ser un patético mosquito, ya son plaga. En fin, una de esas verdades es tan incomoda que hasta vergüenza me da plasmarla: me es muy difícil admitir lo mucho que me estás gustando. Eso es un problema.
Debo dejar de correr cuando veo la luz. Estemos a oscuras, permitime ser yo misma. No quiero seguir temiendo a las pisadas, me cansé de ellas hace mucho tiempo. No sirvo para estas cosas. Como si fuera poco se complica aún más: mi mente me miente, me confunde y me enrosca, es una víbora ( apretará hasta matarme). Llegué al borde no puedo seguir mirando atrás, me decidí voy a hacer todo lo que este a mi alcance para ser una mariposa.

El Témpano.

A veces cuando pienso que todo esta perdido,
voy hacia algunas formas de la muerte.
Me pego un tiro con una palabra
que alguna vez me fue tan transparente.

En la ternura del agua que corre,
me recuerdan la llegada de unos trenes.
Sales de los mares, curvas de los puertos
con mujeres descalzas en el verde.

Voy hacia el fuego como la mariposa
y no hay rima que rime con vivir.
No te pares, no te mates,
solo es una forma mas de demorarte.

En las tardes tranquilas cuando extraño todo,
pienso que todo no es lo que perdí.
Una rosa de feria, y aun a costa de perder
se pierde pero se gana.

La lucha es de igual a igual contra uno mismo,
y eso es ganarla.
No te pares, no te mates,
solo es una forma de mas de demorarse.

Recuerdo la quietud de la tierra,
la quietud de estar adentro.
Se cree mas en los milagros
a la hora del entierro.
Este hombre trabajó,
quien escribirá su historia.
La cal reseca, la viuda que sueña,
los amigos que siguen igual,
la gloria en zapatillas,
el florero vacío.
Quien sabe si se puso a pensar
para que vivo.
Vivo para no perder.

Voy hacia el fuego como la mariposa
y no hay rima que rime con vivir.
No te pares, no te mates,
solo es una forma mas de demorarte.

lunes, 21 de diciembre de 2009

Medio Corazón

Esta noche no quiero oír  nada que no salga de su corazón. 
Se que soy una ladrona, merezco no verla hoy.
 Nene recordame,  no huyas de mi noche. 
No hay nadie a tu lado, a tu lado....hoy... 
Hay un cielo más allá, que necesita no mirar, más atrás. 
Él elige, la verdad, la mentira, en la que vivirá. 
Nene recordame, no huyas de mi noche. 
No hay nadie a tu lado, a tu lado. 
Y si soy yo, la que debe morir con él, 
nunca se sabrá por que siempre me da solo la mitad de su corazón. 
Y si soy yo la que debe morir con él,
 nunca se sabrá por que siempre me da la mitad de su corazón. 
Nene recordame, no huyas de mi noche. 
No hay nadie a tu lado, a tu lado.
Cielo Razzo

[cuando la calma terminó y comenzó el huracán, fue un relámpago el que quemo la casa.
Cuando se apaciguó, solo dejó cenizas.
Aunque siempre está la posibilidad de la reconstrucción. Me aferro al Ciclo, para que salir? ]

jueves, 10 de diciembre de 2009

DR.

-Hola qué tal?, puede sentarse. Cómo se encuentra?
-No sé como explicarlo... es algo extraño, lo había sentido ya, pero últimamente... está presente en mi cada vez más seguido. Es un dolor que proviene del pecho, como si una fuerza superior lo estuviera oprimiendo.
- ya veo... y se desplaza?
-Sí, hasta el estómago, como si quisiera vomitar, sacar todo de adentro, para que se vaya esa molestia y luego, hacia mi rostro... Comienza a salir agua de mis ojos, mi cara se vuelve colorada y los músculos de mi boca se tencionan, quiero sonreír y no puedo.
- Cuanto dura ese proceso, aproximadamente?
- No le sabría decir, generalmente es hasta que me seco. Hasta que no encuentro razón para seguir así. Después, me siento con un peso menos, liviana, como si jamás hubiese estado mal.
- Ya veo.. creo que puede estar relacionado con algo psíquico..
- puede ser, por desgracia siempre pienso cosas que terminan siendo erróneas.
-Sabes que? ya se lo que tiene... por lo que acaba de describir debo decir que, a lo que usted padece, se lo conoce como Angustia. Le aconsejo que hable con un especialista...
- Muchas gracias...


[El tiempo libre me permite volver y girar en círculos, al rededor de la misma porquería. Las hojas son distintas, la raíz siempre la misma.]