Sí, me sucede eso, ya lo comprendí, me quedé sin poder decirte adiós.
Qué tengo que hacer ahora? no quiero esperar a que vuelvas a aparecerte en mi camino. Temo que me olvides. En realidad, temo serte indiferente, aunque, ya lo soy.
Chau, te veré en otra vida, en mis recuerdos, en mis frustraciones.
Qué triste!! ansío tanto verte de nuevo y ahora siquiera puedo escucharte.